Por: Jeduar N. Reyes
Comunicador Social
No entender el valor de ello acarrea pérdidas en el contenido del mensaje, y de una manera bizarra lo fragmenta.
No puedes perder de vista que comunicar es tan natural, simple y complejo como respirar. Esta imagen es un ejemplo.
Quien la ve, siente el valor de ese encuentro y recibe claro y completo la magnitud del gesto, el sentido del ver por mis ojos lo qué está pasando; de ir, de decir con mi voz las palabras de aliento, de no transferir el abrazo en un colchón o alimento, de sentir cerca de mi corazón lo que estás sintiendo y cerrar los ojos al mundo para mirarte dentro de la única manera que hace clara y visible la vida, el lenguaje honesto de los sentimientos.
No crean que es solo suerte; si no pones el corazón no podrás entenderla y entenderme.